Ya de pasó dejo otra canción de cricri
Cocuyito playero
Quien va por la obscuridad?
quien va por la obscuridad?
quien va por la obscuridad?
la noche cayó,
por todas partes solo hay obscuridad
la noche cayó,
y ya no vemos para donde caminar
negrito ven junto a mi
pues hace rato que te perdí
y si es de noche has de saber
que a los negritos no puedo ver.
Cocuyito playero
ilumina el sendero
con tu linterna de plata
dame luz
cocuyito playero
tú sabes que te quiero
llevame a mi casita
en Veracruz.
Quien va por la obscuridad?
quien va por la obscuridad?
quien va por la obscuridad?
la noche cayó,
y todo está mucho más negro que el carbón
hay que comprender
que ni siquiera mis narices puedo ver
negrito ven para cá
agarra fuerte mi cinturón
pero camina no hay que jalar
porque me expones a un tropezón.
Cocuyito playero
ilumina el sendero
con tu linterna de plata
dame luz
cocuyito playero
tú sabes que te quiero
llevame a mi casita
en Veracruz
en Veracruz
en Veracruz.
martes, 20 de noviembre de 2012
martes, 13 de noviembre de 2012
Buscando el sol
Siempre me he identificado con los mosquitos que rodean las lámparas en las noches de los lugares tropicales. Dejo un bicho que busca el sol :-) y una canción que le dedicó Cri cri. Me parece un asunto muy tierno y serio, la empatía con los mayates.
Dos Mayates
Francisco Gabilondo Soler (Cri cri)
De foto natura.org
Dos mayates,
un par de escarabajos muy brillantes,
van juntos en camino a los arriates
que están al fondo del jardín,
donde queda calientito el sol.
Dos mayates,
rechonchos como son los chocolates,
a tumbos y tropiezos van tenaces
tratando de alcanzar por fin,
las hierbitas que calienta el sol.
Más uno es cojo,
el otro también,
éso no importa,
se llevan muy bien
paso a pasito
tardando en andar,
cuando podrán llegar.
Dos mayates,
si los ves pues no los pises, no los mates,
los pobres son insectos incapaces
de hacerte ningún daño a tí,
van en busca del caliente sol.
Dos Mayates
Francisco Gabilondo Soler (Cri cri)
De foto natura.org
Dos mayates,
un par de escarabajos muy brillantes,
van juntos en camino a los arriates
que están al fondo del jardín,
donde queda calientito el sol.
Dos mayates,
rechonchos como son los chocolates,
a tumbos y tropiezos van tenaces
tratando de alcanzar por fin,
las hierbitas que calienta el sol.
Más uno es cojo,
el otro también,
éso no importa,
se llevan muy bien
paso a pasito
tardando en andar,
cuando podrán llegar.
Dos mayates,
si los ves pues no los pises, no los mates,
los pobres son insectos incapaces
de hacerte ningún daño a tí,
van en busca del caliente sol.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)